Cómo Evitar Y Tratar El Cólico Renal Que Para Muchos Es el Peor Dolor De sus Vidas

Si los cálculos renales son pequeños pueden pasar a través del tracto urinario sin causar una gran incomodidad, pero si crecen mucho pueden atascarse y requerir que se eliminen por medio de procedimientos médicos. Además es posible que causen “el peor tipo de dolor de sus vidas”: el cólico renal.

El cólico renal es un tipo de dolor causado por un bloqueo en algún lugar del tracto urinario, que consiste en riñones, uréteres, vejiga y uretra. Los bloqueos son comúnmente causados por cálculos renales. Los espasmos ureterales, los coágulos de sangre y el tejido muerto también puede provocar un bloqueo.

Alrededor del 12% de los hombres y el 6% de las mujeres desarrollan cálculos urinarios en algún momento de sus vidas. Debido a los cambios en la dieta y otros factores de estilo de vida, el número de personas que están en riesgo de desarrollar cólico renal está creciendo.

 

Síntomas

  • Dolor severo en la parte inferior de la espalda, parte inferior del abdomen y la ingle.
  • Dolor al orinar.
  • Cambio de color de la orina a rosa, rojo o marrón, lo que indica la presencia de sangre.
  • Necesidad intensa y frecuente de orinar.
  • Disminución de la micción
  • Fiebre y escalofríos, si es que hay una infección.
  • Nauseas y vómito.

Estos síntomas generalmente aparecen y desaparecen, además cambian según la gravedad del problema.

 

Tratamiento

  1. Litotricia extracorpórea por indas de choque (ESWL): Procedimiento en donde las ondas sonoras se utilizan para romper grandes piedras en pequeños trozos, que son lo suficientemente pequeños como para pasar a través del tracto urinario y salir del cuerpo.
  2. Ureteroscopia: Un médico utiliza un instrumento de visualización delgado llamado ureteroscopio para extraer la piedra.
  3. Nefrolitotomía percutánea: Procedimiento generalmente realizado con anestesia general. El cirujano hace una pequeña incisión en la espalda y saca la piedra.

 

Cómo evitar el cólico renal

Estos consejos te ayudarán a reducir el riesgo de padecer cálculos renales:

  • Beber mucha agua y limitar el consumo de té y café.
  • Comer menos sal.
  • Limitar las fuentes de proteína animal en la dieta.
  • Limitar los alimentos ricos en oxalato, como la espinaca, el ruibarbo y las nueces.
  • Limita la actividad en temperaturas altas, pero si es imposible, al menos mantenerse hidratado.