Decidió Ayudar A Un Vagabundo Pero Le Dio Algo Mucho Mejor Que Dinero

Adam August es un joven que se propuso hacer algo realmente importante y significativo para ayudar a los vagabundos y no solo darles dinero cuando lo pidieran en la calle.

Él decidió ayudar a uno en particular y esta es su historia:

“He visto a este hombre afuera de Starbucks varias veces. Cada vez que lo veía me decía a mi mismo que lo llevaría a almorzar, pero siempre encontraba una excusa para no hacerlo. Me acerqué a él, le puse la mano en el hombro y le dije: “¿Quieres almorzar conmigo?”

Tarec Atkinson nació y creció en Jamaica. Cuando era un niño, soñaba con ser un famoso jugador de fútbol. Fue reclutado para jugar en la escuela, pero nunca tuvo la oportunidad debido a algunos problemas en su adolescencia. 

Se mudó a los Estados Unidos hace 8 años y ha pasado los últimos 12 meses viviendo en una casa de campaña al lado de la autopista. Tarec dura varios días sin comer, pasa el 90% de su tiempo solo y no tiene amigos ni familia en este país. 

Después de escuchar que había pasado un mes desde que se bañó, lo traje de vuelta a mi departamento para que pudiese disfrutar de una ducha caliente. Debido a todas estas dificultades, tratar de conseguir un trabajo es imposible. ¿Cómo puede llenar una solicitud cuando no ha comido en días? Le dije a Tarec que iría con él la próxima semana y le ayudaría a llenar solicitudes e incluso hablar en su nombre para ayudarle a conseguir un trabajo. Acordamos reunirnos ese viernes a las 9:30 am. en Starbucks.

Si íbamos a hacer que esto sucediera, sabía que teníamos que conseguirle a Tarec ropa nueva. Nos detuvimos en Ross para que pudiera elegir una camisa y unos pantalones. Me sorprendió el cambio inmediato en su comportamiento. Su sonrisa era radiante, se paró más erguido e inclusive empezó a caminar diferente.  

El siguiente paso era ir a las calles. Pasamos los dos días siguientes de puerta en puerta para ver quién estaba contratando. Fuimos a Walgreens, CVS, Safeway, Home Depot, Molly Stones, y Starbucks sólo por nombrar unos pocos. Caminé con él para que supiera que no estaba solo.

Puede ser abrumador entrar en un negocio y pedir un trabajo. Estaba muy orgulloso de él. Tuvimos algunas respuestas positivas, pero la mayoría de las empresas nos dijeron que las solicitudes se presentan en línea. ¿Fácil? Pues no.

Tarec no tiene una computadora. Así que fuimos a la biblioteca pública y empezamos a llenar las solicitudes. Y déjame decirte algo. Verlo luchar para llenar una solicitud puso tanto en perspectiva para mí.

Algunas personas juzgan a esas personas. Todos hemos oído a alguien decir “¿por qué no sólo consigue un trabajo?” O “son perezosos”. Vi cómo el “sistema” está configurado para hacer fallar a la gente como Tarec. No hay manera de que él hubiera podido hacer nada de esto sin mi ayuda. Al igual que hay muchas cosas en mi vida para las que he necesitado ayuda.

Todos necesitamos un poco de ayuda.

Después de una semana de entrevistas telefónicas, Tarec consiguió una entrevista personal en Safeway. Recuerdo que al conducir a Safeway estaba nervioso. Cuando llegamos, le deseé suerte y esperé.

Veinte minutos más tarde, lo veo salir de Safeway con una gran sonrisa y un pulgar hacia arriba. ¡Wooooo! Fue lo único que pude decir. Habíamos logrado mucho juntos en dos semanas. Fue un momento increíble”.

 

No nos cuesta nada dedicar un par de horas de nuestro día haciendo algún gesto de amabilidad o ayuda, que para muchos puede parecer innecesaria, pero para otros podría ser un gran cambio en su vida.

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