Dentista Lo Anestesió Más De La Cuenta Para Regalarle Una Sonrisa Nueva Sin Que Lo Supiera

Navegando por Facebook el Dr. Kenny Wilstead se encontró con las fotografías de Dilon Moore, de Marshall, en Texas, Estados Unidos y se dio cuenta de que no sonreía en ninguna. El dentista supo de inmediato que algo debía estar pasando con la sonrisa de Dillon y decidió hacer algo.

Fue así como el Dr. Wilstead contactó a Dilon para ofrecerle sus servicios. La respuesta del afectado fue un no debido a que no podía faltar a su trabajo para ir a la consulta del odontólogo.

Tras el paso de un tiempo, las vidas de Dilon y el dentista se encontraron y el odontólogo supo de inmediato que debía hacer algo:

Él olvidó mi oferta por un año entero, hasta que sufrió de dolor de muñón. El jefe del chico quiso ayudarlo y decidió enviarlo a mi consultorio para que yo le extrajera un diente, y le dio un día entero de descanso para que yo concluyese el trabajo.

Dilon creyó que sólo le quitarían el diente que le estaba provocando dolor, pero el dentista quiso hacer un trabajo mayor en su dentadura de forma gratuita.

El dentista tomó una arriesgada decisión, pero lo hizo porque su mente le decía lo que era correcto:

Yo me acordaba quién era él y de la oferta que hice hace un año. Él no me reconoció, pero decidí hacer el bien de todos modos. Secretamente, usé más anestesia de la normal para quitar un solo diente y use una cantidad que lo mantuvo dormido suficiente tiempo para yo poder rehacer toda su sonrisa sin que él supiera o me diera permiso.

Casi un año después de realizar el proceso en la dentadura de Dilon, el dentista que lo ayudó decidió mostrar la reacción de su paciente tras darse cuenta de su antes y su después. Las palabras de Dillon son conmovedoras:

Yo no soy tonto, obviamente me preguntaba por qué estaba demorando tanto. Simplemente no lo puedo creer, yo no sonrío sin poner la mano en mi boca desde que era un niño.

El odontólogo dejó el siguiente mensaje en su publicación que ya es viral:

Hoy fue un día especial, hice una transformación en la sonrisa de un paciente sin que él lo supiera.

El procedimiento duró dos horas y fue una gran experiencia para ambos. Para el doctor tratante fue muy emotivo recibir fotografías de Dilon donde sus hijos se veían felices de que su padre pudiera sonreír por primera vez en su vida.

La vida de los dentistas es una de mucha vocación y servicio para recuperar sonrisas pérdidas, pero la acción de este dentista, tan desinteresada y solidaria habla de un gran hombre que sólo busca que otros puedan vivir felices y tranquilos, sonriendo ampliamente en su vida diaria.